La seguridad privada juega actualmente un rol
importante y clave para sus clientes, además de ser un elemento disuasivo para
quienes deseen infringir las normas establecidas, son uno de los puntos de
contacto entre el cliente y la empresa.
Es claro que el personal de
seguridad, no sólo corre un riesgo inherente a su actividad, sino que además
está inmerso por su visibilidad, en una dinámica en que su actuar es una de las
variables críticas de la entrega de un buen servicio al cliente, o por el
contrario una pésima imagen y serios problemas para sus clientes, si no sabe
cómo enfrentar ciertas situaciones a las que se verá enfrentado.
Obviamente, una buena
capacitación del personal, podrá prevenir muchas situaciones cotidianas, la
cual sin duda, técnicamente y para situaciones complejas, las empresas del
rubro son especialistas, pero... HAY ALGO EN DONDE SE PUEDEN DIFERENCIAR Y
BENEFICIAR RESPECTO DE SU COMPETENCIA.
En la actualidad muchas empresas
están incorporando a sus equipos de trabajo a personas con discapacidad
auditiva, con un claro objetivo de integración y responsabilidad social. Es
frecuente en la actualidad ver que estas personas están mucho más insertas en
la sociedad, es común verlos en las calles, y sobretodo es común verlos como
clientes igual que cualquiera de nosotros. El problema es que… son muy pocos
los que saben comunicarse con ellos.
Pongámonos en el escenario de una
persona que en su rol de seguridad y se enfrenta a una persona con discapacidad
auditiva, cómo lo enfrenta, cómo lo controla, cómo lo orienta, cómo se
comunica, según sea la necesidad… HOY NO TIENE COMO HACERLO, lo cual podría
generar múltiples confusiones y problemas, tanto a la empresa como al propio
afectado.
Ya se han conocido casos de
retenciones y/o detenciones por error, por una falencia clara de comunicación,
o mejor dicho de incomunicación, y el problema no fue de quien quería
comunicarse, sino de quién no sabía comunicarse.
Evítele a su cliente
- La pérdida de clientes,
- Daños en su imagen y
divulgación de estos errores en redes sociales,
prensa y televisión, recuerde que su
empresa al prestar un servicio pasa a ser
parte conjunto visible de la empresa contratante y son ellos a quienes acusarán
los involucrados, estén o no involucrados en el problema,
- Enfrentar la crítica social,
- Enfrentar procesos judiciales
extensos y demandas civiles onerosas,
- Tener que buscar un nuevo
proveedor de servicios.
Evítele a su empresa
- Enfrentar la rotación de
personal que tanto le ha costado conseguir y formar,
- Dañar la imagen de su empresa,
- La divulgación de error de unos
pocos, que le podría afectar a muchos,
- La pérdida de contratos,
- Enfrentar procesos legales que
lo único que hacen es tensionar las relaciones comerciales.
Entregue a sus clientes un
servicio con real valor agregado, un servicio al cliente en donde disminuya
cualquier potencial error por falla de comunicaciones, sea parte de un servicio
integral en donde su gente sea realmente la cara de una empresa preocupada de
todos aquellos con quienes interactúe.
¿Cómo hacerlo?
ILIA Capacitación ha desarrollado
el Curso de Lengua de Señas para Empresas de Seguridad que le ayudará a
enfrentar estos escenarios